Escasez, precios cuidados y Estado
Cuando hace algunos meses se anunció el corte de agua por algunos días o en aquel 2017 que se produjo el fenómeno del 'Niño costero', la reacción inmediata de un importante sector de la población fue acudir a los supermercados y adquirir tantos productos como le fuese posible trasladar. Incluso personas que no vivían en las zonas directamente afectadas no tardaron en desaparecer hasta los limones.
Como era de esperarse, ante lo que ya es considerada una pandemia por Organización Mundial de la Salud (OMS), la reacción no ha sido distinta a las situaciones anteriormente mencionadas. La población, especialmente los sectores más pudientes, han arrasado con los productos de primera necesidad.
Lo que suele ocurrir ante este drástico incremento de la demanda es el alza de los precios y es por ello que hace falta la intervención del Estado manteniendo los precios de estos productos para que las personas de menos recursos no queden desabastecidas o imposibilitadas de adquirir productos básicos ante un eventual aumento de precios.
En Argentina, donde la situación no es muy distinta, el gobierno peronista de Alberto Fernández dispuso como primera medida que el precio del alcohol en gel se congele por noventa días y cueste lo mismo que en la quincena de febrero, antes que se desatara la alarma por el Coronavirus. Esta posibilidad debería ser considerada por el presidente Vizcarra.
Seguramente esta posibilidad no será del agrado del sector privado, pero se debe tener en cuenta que el Coronavirus todavía no ha logrado ser controlado ni se conoce la forma de erradicarlo. Ante una situación así lo peor que puede pasar es que un sector de la población encuentre inaccesibles los productos básicos.