Si bien los integrantes de Fuerza Popular no se caracterizan precisamente por tener mentes brillantes, hasta para ellos es una realidad que tanto en las elecciones que se realizarán durante los próximos dos años difícilmente consigan un número de congresistas que les permita ser una bancada de peso y, por supuesto, las posibilidades de llegar a la presidencia con Keiko Fujimori son mucho menores.

Casualmente con este inevitable ocaso de Fuerza Popular ha llegado un inesperado pronunciamiento del menor de los Fujimori culpando a la bancada que lidera su hermana de la crisis política que atraviesa el país. Esta postura de Kenji hubiese causado impacto algunos añod atrás pero no en la actualidad cuando a este acto del fujimorismo se le notan los hilos.

Fue allá por 2017 cuando por primera vez Kenji intentó tomar una postura "rebelde" hacia su bancada y fueron muchos los que creyeron que realmente él era el Fujimori bueno. No obstante, poco tiempo después quedó al descubierto que la motivación detrás de esta inusitada rebeldía y conformación de una nueva bancada no estaba el bienestar del país sino la intención de obtener el indulto para su padre.

En esta oportunidad no sería raro que la intención sea la misma. Aunque también se le podría sumar la intención del fujimorismo de intentar llegar al poder bajo la imagen de un personaje que genera menos anticuerpos que Keiko. Ahora dependerá del electorado peruano no caer en esta nueva actuación de Kenji.